Al principio del semestre, leímos la obra de teatro Yerma por Federico García Lorca. El fin de semana pasado, la clase fue al teatro para ver una representación de Yerma pero no pude irme; entonces, he mirado una grabación de la obra en el Internet.
Cuando empezó la grabación, yo pensaba que no fuera a recordar el trama de la obra a causa de hacer leerlo hace unos meses, pero me acordé inmediatamente cuando los actores entraron al escenario. Me he encantado ver la representación porque se puede entender toda la emoción y los sentimientos de los personajes. Es muy apasionante verlo.
Para mí, un elemento de la producción que se destacó era la simplicidad del escenario. Era sencillo, con muchas luzes y sombras para que el público se enfocara en un personaje específico - la mayoría del tiempo, este personaje era Yerma. Por ejemplo, en una escena de Acto I que trata de una pelea entre Yerma y su marido Juan, Yerma estaba iluminada (y llevaba una vestida blanca) mientras que Juan estaba en la sombra. La luz dió la enfasis en la belleza y pureza de Yerma, y prefiguró los problemas que tendría con Juan por ponerle a él, que ya estaba enfadado con ella, en la oscuridad.
Ojalá que yo pudiera asistar a la producción con el resto del grupo, pero también me gustó ver la grabación. Prefiero ver las representaciones de teatro que leer los guiones a causa de la emoción y la intensidad que muestran los actores.
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